El autor ha osado en este relato transformar a las palabras como protagonistas de su relato. Narra la relación corporal del escritor con ellas, con la materia de la cual está hecha la lengua, la ficción, la poesía, etc. Ha escrito: “La articulación necesitaba del ejercicio, y al ejercicio se llegaba con la práctica. Si ésta no existía, todo estaba destinado al fracaso. Había que practicar, conseguir el mecanismo, la repetición, el hábito. Había que poder convertir lo difícil en hermoso...” Describe el proceso por el cual la mente del autor condena a lo “indecible” al exilio, al abismo negro de lo cotidianamente irrepetible...

• Otra de tantas muertes (relato) por Pablo Maximiliano Lavía