Una muerte, una stripper, una exculpación, una descripción de Rául, un travesti. Con la narrativa de quién se defiende y quién tiene mucho que callar aparece este texto directo, mejor dicho directísimo, que refleja un estilo depurado y trabajado a la hora, narrar la historia de una maestra y su amigo. La sorpresa final garantiza la lectura, al mismo tiempo es el mejor baluarte de la capacidad de la escritora. Y es que Silvia Hebe Bedini lleva algunos años caminando junto a la literatura. Desde que empezó en Buenos Aires, como médica, hasta su llegada a Estados Unidos para enseñar talleres de literatura creativa, no ha parado de decir quién es y de mostrar la fuerza de su pluma: punzante, sin tapujos, pulsional, ulterior, resonante... Antonio Guerrero